*Obra motivadora
|
Rascacielos: pocas palabras en la lengua castellana son tan significativas.
Rascacielos: enormes edificios que semejan dedos estáticos de hormigón, acero y vidrio estirándose hacia el firmamento, como si quisieran alcanzarlo y tocarlo. ¿Qué motiva a los hombres construir tamañas estructuras? ¿Será el mismo y antiguo afán que movió a aquellos en tiempos de la Torre de Babel? Solo los limitan los cálculos de los ingenieros, la resistencia de los materiales o los recursos disponibles.
A medida que anochece sobre la ciudad, cada una de las ventanas se enciende gradualmente hasta que casi todas brillan. Cada ventana, una vida. Cada vida, un mundo. Millones de mundos iluminan a la distancia en medio de la oscuridad de la noche. Paisaje mágico, bello y encantador. Se lo podría admirar por horas mientras surgen infinitos interrogantes en la mente: ¿Qué hay detrás de los cristales? ¿Cómo son esas vidas? Familias enteras comparten la cena alrededor de la mesa. Abuelos solos miran televisión y esperan que alguien los visite. Joven estudiante prepara un examen. Amantes arrullándose cual palomas. Discusiones. Confesiones. Sueños. Amores y odios. Departamentos cerrados, vendidos o por alquilar. Miles de posibilidades; tantas como ventanas. Y en medio de esa miríada de historias, imaginándolas, uno puede sentirse infinitamente solo.
Liliana
*De la exhibición fotográfica MODO M, de Aldo Ferrari, Biblioteca Alberdi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, nos gustaría que nos dejasen su opinión. Así seguimos aprendiendo y compartiendo con ustedes. Gracias.